Reflexiones sobre la guerra de Irak

Desde Arizona el “Otro Sur” llega el sudor en canto de arados, la voz de mujeres y hombres de maíz, así la luz de las lechugas, son gentes que emergen del trigo.

Con el saludo cordial a mis lectores, hoy juntos vamos a compartir nuestros puntos de vista con el respeto al derecho ajeno y amparados bajo la libre expresión del pensamiento, así pues hablaremos del bien y el mal que ya pasa y vive con los anos de guerra, y que día a día afecta el sobrevivir digamos dentro a lo que en nuestra sociedad respecta.

Pues sabrán ustedes que últimamente he estado dentro la reflexión de ver los hechos en la formación de esta guerra en el país de Iraq. Uno a uno han llegado los recuerdos de cada incidente o anomalía que suscitara después del nefasto 11 de septiembre en la ciudad de New York. Ese fue el día del principio de una venganza, oh quizás una escusa para encontrar la razón de atacar con golpes de fuego, a una nación que nunca pensó tener una amenaza para la seguridad de nuestra en el continente Americano. Esa revancha digamos que en el camino acarrearía, muerte, sangre, lagrimas, tristeza, terror, destrucción y el poco respeto a la integridad y existencia de la vida humana, que palpita en gentes diferentes, inocentes como las del mismo New York Trade Center, aquel 11 de Sept. 1,991 y ahora en el país Iraquí.

Estas venganzas de humanos, pretexto de los poderosos, les hacen sonar en los beneficios monetarios que se desgranan en la amplitud de diferentes comercios productivos, en especial para las naciones dominantes. Si, las mismas que son amantes de que el mercado de valores, escale records de ingresos económicos en cantidades mas que súper maravillosas, basados en los intereses y los inmensos provechos monetarios, que una guerra causan en su inversión a la construcción y el huso de armamento, sin importar el valor de las vidas humanas que no esperan la llegada de la muerte inesperada, al que un día fuese, calor de un hogar donde solo el amor y la paz palpitaba. Así como en otros cuantos millones de hogares por los cuatro puntos cardinales de la tierra. No digamos también a esos jóvenes hombres y mujeres que operan esas armas como aviones, de toda clase de propulsión y transportadores de las bombas mas criminales que pueda existir en la faz de la tierra. Tanques, portaviones, destructores, submarinos, torpederos y cientos de miles de soldados atacando a un pueblo que sin saberlo iba a ser liberado… Liberado de que? Cuantos seres de ambos lados han dejaron su vida dentro el humo que de la muerte evaporaba lágrimas de silencio.

Nuestro presidente George Bush declaro lo siguiente: “América tiene una responsabilidad con la historia, y esa es erradicar al diablo del mundo.” La seguridad en que el presidente Bush sentaba su palabra, en la seguridad y un unánime respaldo de todas las fuerzas armadas de Estados Unidos y de las cuales el es el Comandante General de ellas. Con la potencia armamentista y en la cual parece que nuestra nación es la numero uno en el Mercado Internacional. Una pequeña demostración de lo que son capaces de hacer, abre muy buenas puertas comerciales ante los países que también les encanta ser bélicos. Toda esta fuerza armamentista está listas, para descargar un ataque inhumano contra cualesquier nación, que nuestros gobernantes piensen y crean, sean una posible amenaza para la seguridad del pueblo Norte Americano, no yo no pienso que esa es una manera correcta de pensar, ya que lo que esto nos indica que ningún país del mundo, puede tener la libre determinación de elegir el sistema político que piensen es el único futuro para sus gentes en la lucha por la conquista de un mejor mañana, y así todas aquellas esperanzas tornarlas en una verdadera realidad, donde los pueblos vivan bajo el sistema político que mas les conviene, sin que nadie les diga cuales son los caminos para encontrar el futuro deseado.

Nuestro presidente piensa que Dios, marcha con el en todos los proyectos bélicos de su gobierno y la nación. Esta es una de las veces, de las tantas repetidas en que menciona o proclama que nuestra nación, fue escogida por Dios y nos hiso saber que según el, que nosotros estamos comisionándonos con la historia, hacer de esta nación es y será siempre un ejemplo para el resto del mundo, no mis lectores en lo que a mi respecta no pienso que las guerras sean la solución de las grandes naciones para dirigir los destinos delas ahora y futuras generaciones.

Que piensa usted mi estimado lector?


Sal Troccoli